Como en cada edición del SOPA, desde 2015, durante la semana del congreso celebramos un seminario monográfico para visibilizar y profundizar en temas que consideramos que son importantes en el ámbito, no solo del patrimonio rural, sino de la cultura, los territorios y sus comunidades.
El lema de este año, LA VIDA EN EL CENTRO, y la coyuntura del contexto que nos acoge, un territorio muy envejecido, pero con una gran esperanza de vida, nos ha hecho pensar en que las personas mayores son en muchas ocasiones, los principales protagonistas de los procesos de socialización del patrimonio cultural y de la memoria colectiva, y, sobre todo, en el medio rural. Es por eso que este año hemos pensado que el seminario debería tratar esa colectividad y por eso llevará por título EL SABER MAYOR, EL MAYOR SABER.
Las políticas públicas tienen entre sus objetivos la diversificación de la economía rural, el mantenimiento de la población del medio rural y la mejora de su calidad de vida, garantizando unos servicios públicos adaptados a las características específicas del territorio y adecuados a las necesidades de la población, con atención prioritaria a las necesidades de las personas mayores. En este contexto, la búsqueda de soluciones al problema del envejecimiento de la población, además de suponer un reto para el futuro y la sostenibilidad del medio rural, puede ser visto como una oportunidad para la revitalización y la diversificación de la economía rural. El hecho de ser necesaria la creación de servicios y de infraestructuras hace que trabajar en la mejora de la calidad de vida de las personas mayores contribuya al desarrollo sostenible del medio rural, tanto a nivel social como económico y ambiental. Y ahí, el patrimonio cultural tiene un papel importante.
Y es que, en el mundo rural, se ha valorado y transmitido siempre la importancia de la continuidad entre pasado, presente y futuro, y de pertenencia a un territorio y unos conocimientos, valores y cultura socialmente construidos. La historia familiar, las tradiciones, el papel de las personas mayores, los lugares y las rutinas conocidas y compartidas por toda la comunidad son los elementos a través de los que se garantiza esta continuidad social y cultural que sirve de marco de referencia indispensable para el desarrollo de la vida cotidiana de esa colectividad.
Para hablar de todo ello, estableceremos un par de jornadas dentro del SOPA (aunque también podrán darse algunas actividades que de forma transversal vayan fluyendo a lo largo de la semana del congreso) en el que trabajaremos aspectos como:
-Cómo diseñar procesos de recuperación de la memoria colectiva con personas mayores.
-Cómo fomentar las relacionales intergeneracionales a través del intercambio de conocimiento.
-Cómo potenciar la comunicación, la convivencia, los cuidados y las relaciones interpersonales para hacer frente a los problemas de soledad y aislamiento que sufren nuestras personas mayores.
-O, cómo estamos gestionando los compromisos o las responsabilidades de las personas mayores en el mantenimiento de los saberes rurales.
Y es que hay que resaltar que a pesar de que muchos de los procesos de mediación y/o socialización del patrimonio en las zonas rurales se centre en personas mayores, estos no se pueden desarrollar de forma aislada al resto de la realidad sino que es imprescindible hacerlo de forma integrada favoreciéndose el intercambio con otros sectores y potenciando el contacto con otros contextos sociales y culturales, para que cada habitante de estas zonas llegue a sentir que puede contribuir a una construcción sólida del tejido social de su territorio.
Para el seminario EL SABER MAYOR, EL MAYOR SABER, además de charlas, conversatorios y otras acciones culturales, abriremos convocatoria para la presentación de comunicaciones.
